«No olvidemos nuestra esencia» Candidatura a la Bofetá de D. Joaquín García Tapial
Quedan ya menos de 48 horas para que celebremos el Cabildo de Elecciones. Toca por tanto hacer las últimas reflexiones, que sirvan de colofón a la extensa relación de entradas en las que hemos ido desgranando nuestras ideas y propuestas para los próximos 4 años. Y he querido reservar esta última entrada de propuestas (la entrada de mañana por fuerza debe ser más reflexiva) a los Cultos. Porque éstos constituyen el origen de las Hermandades, nuestra razón de ser y el fin primordial. Nuestra Historia y la historia de las Hermandades así nos lo cuentan y nuestras Reglas así lo definen (Según las Normas Diocesanas el fin de las Hermandades es «promover el culto público a los misterios de la Pasión, Muerte y Resurrección del Señor, al Santísimo Sacramento de la Eucaristía, a la Santísima Virgen y a los Santos» y según nuestra regla 7 «El fin primordial es el de acrecentar el amor a Dios y a los hermanos, mediante el culto, adoración y acompañamiento a Jesús Sacramentado, en el cumplimiento de los mandatos evangélicos de que nos amemos los unos a los otros como Jesús nos amó y que prediquemos la Buena Nueva evangelizando a todas las gentes para contribuir al establecimiento del Reino de Dios.»). Y sin embargo, salvo en lo referido a nuestra Estación de Penitencia, apenas tienen reflejo a la hora de hablar de propuestas y proyectos para la Hermandad. Por ello, para que no olvidemos cual debe ser nuestra esencia, he querido reservar esta penúltima entrada a ellos.
Así, respecto a los Cultos de Reglas, fomentaremos su solemnidad, en primer lugar acercando a nuestra Hermandad a Sacerdotes que puedan hacer profundizar a nuestros hermanos y hacerlos crecer en su fe cristiana, no olvidando con ello tampoco la misa de Hermandad de los martes, a la que invitaremos a participar en ella a aquellos hermanos de nuestra corporación que sean sacerdotes. Igualmente impulsaremos la participación de nuestros hermanos en dichos cultos, potenciando su involucración activa, ya sea como lectores o como servidores del altar, destacando en esta última faceta nuestros hermanos jóvenes del cuerpo de acólitos a los que formaremos convenientemente, por medio de cursillos, para que su participación no sólo sea portar un cirial o un incensario o revestirse de tal o cual manera y conozcan realmente cual es su labor en el altar. En este plano, cuando las posibilidades económicas de la Hermandad lo permitan, realizaremos paños sagrados, ternos de los sacerdotes y ropajes de los acólitos para que estos vayan conforme a la liturgia, y no nos veamos obligados, bien a usar las de la Parroquia o usar las dalmáticas de la Cofradía que no coinciden con los colores litúrgicos de nuestros cultos. Igualmente en los meses de mayo y octubre, dedicados a la Santísima Virgen María, se fomentará la práctica del rezo del Rosario.
En cuanto al Culto Eucarístico, fomentaremos el mismo, ya que si bien no somos una Hermandad Sacramental, esto no debe de ser óbice para dejar a un lado la adoración al Santísimo. Por ello, impulsaremos dicho culto entre nuestros hermanos, cuidando que los días que nos corresponde el Jubileo en San Lorenzo, coincidiendo con la festividad del Dulce Nombre de María, haya turnos de hermanos adoradores permanentemente junto al Santísimo y este no se encuentre en ningún momento sólo mientras esté de manifiesto. Del mismo modo, participaremos en el turno que nos asigne la Asociación de Turno y Vela de Sevilla, durante el triduo de Carnaval en la Iglesia de Santa Cruz. Igualmente y siempre que hubiera un número de hermanos y hermanas dispuesto para ello, organizaríamos un turno de Adoración Nocturna en la Parroquia, conjuntamente con la Hermandad de la Soledad.
En lo que se refiere a los cultos ordinarios de la Parroquia, igualmente fomentaremos nuestra participación en los mismos, destacando nuestro compromiso en participar en la Misa dominical de 12:00 en la forma en la que estime oportuna el Párroco y su coadjutor. También promoveremos la participación de nuestros hermanos más jóvenes en Eucaristías preparadas por y para ellos.
Igualmente, y de la mano con la formación ya tocada anteriormente, nuestra hermandad fomentará los grupos de comunión y confirmación, para que nuestros hermanos puedan hacer estas celebraciones ante nuestras Sagradas Imágenes.
Por último, vamos a procurar dar más realce al Vía-Crucis del Santo Cristo del Mayor Dolor, promoviendo la realización del mismo a lugares ligados de una u otra manera a nuestra Hermandad, y, si fuera posible, solicitando la cesión de parihuelas por parte de otras hermandades.
Estos son solos los primeros pasos que queremos dar en esta dirección. Si la respuesta por parte de los hermanos es positiva, pondremos en marcha más actividades en esta línea (Retiros espirituales, convivencias, etc.).
Como decía al principio, con esta entrada terminan nuestras propuestas: en estas semanas hemos abordado asuntos como la Acción Social, la Formación, la Juventud, los Niños, la Cofradía, el Patrimonio Artístico, etc., etc., que intentan compendiar cuáles son nuestras ideas para los próximos años. Todo ello ha sido fruto del trabajo de muchos hermanos y recogen, con honestidad, nuestras ilusiones. Corresponde ahora a los hermanos decidir el viernes si éste es el proyecto que quieren para nuestra Hermandad.
Fuente: lapasion.org