María Santísima de la Concepción presidió el rezo del Santo Rosario por las calles de su entorno, hasta San Pedro y San Pablo

María Santísima de la Concepción, Titular de la hermandad de Nuestro Padre Jesús del Amor y la Entrega, presidió el rezo del rosario en la tarde de ayer. Durante algo más de una hora la imagen recorrió la placeta de la Concepción, la calle San Juan de los Reyes, Cuesta del Chapiz y el paseo de los Tristes, hasta llegar a la Carrera del Darro y entrar en San Pedro y San Pablo. En este lugar el sacerdote Justo Sánchez presidió la Eucaristía, acompañado por el párroco y consiliario, Enrique León. Veintiocho parejas de hermanos formaban el cortejo de la hermandad que contó también con el acompañamiento de las hermandades de Nuestra Señora de los Dolores y del Santo Sepulcro. En la antepresidencia formaban los exhermanos mayores de la cofradía y en la presidencia, el hermano mayor, Juan Miguel López y el presidente de la Real Federación de Cofradías, Antonio Martín, así como el hermano mayor en funciones de la cofradía de la Esperanza, hermano a su vez de esta hermandad de la Concepción, Ángel Córcoles.

La salida en rosario vespertino de esta imagen mariana había despertado el interés en muchos cofrades granadinos que acompañaron a la cofradía y a la Santísima Virgen en su trayecto hasta la parroquia de San Pedro y San Pablo, lugar sagrado que no recibía a esta hermandad desde hace ya más de una década cuando tuvo que salir de este templo por las obras en el monasterio contemplativo de la Concepción.

En el trayecto del rezo del Santo Rosario, la hermandad fue recibida por la cofradía del Víacrucis en la puerta de su sede canónica, en San Juan de los Reyes. La hermandad decana interrumpió una sesión de su junta de gobierno, para acompañar a esta hermandad que pasaba ante su sede canónica. Estuvo el comisario de la hermandad, Salvador Garzón, al frente de la corporación del Víacrucis, acompañado por varios miembros de su junta de gobierno.

Tras la celebración de la Eucaristía en San Pedro y San Pablo, el cortejo se volvió a organizar para acompañar a la Virgen, por la Carrera del Darro y Concepción de Zafra, hasta su sede canónica.

Fuente: Granadacofrade

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