Procesión del Silencio: las mejores de España
La procesión del Silencio es una de las procesiones que mueve a más devotos en la Semana Santa de Sevilla. Esta popular festividad se realiza en la madrugada del jueves al viernes Santo, y durante esta procesión los feligreses veneran las imágenes de la hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno, Santa Cruz en Jerusalén y María Santísima de la Concepción que se fundó en el siglo XIV.
Durante la semana santa se realizan una serie de procesiones que demuestran la devoción de los feligreses, estas por lo general se acompañan de grandes celebraciones donde participan distintos personajes agrupados en cofradías o hermandades religiosas, sin embargo, esta en particular representa el último dolor de la virgen María al ver a su único hijo muerto.
La historia
Según relata la historia en 1.793 el rey Carlos IV hizo la donación del convento e iglesia de San Antonio a la Hermandad de la Santa Cruz en Jerusalén, que se conoce popularmente como Cofradía del Silencio. Un nombre que se le acuñó por el orden, recogimiento, seriedad y silencio absoluto con que sus integrantes llevan a cabo su estación de Penitencia a la Santa Iglesia Catedral.
Esta fue la primera hermandad de la ciudad que hizo un voto y juró defender el dogma de la Inmaculada Concepción ante los ataques verbales de los dominicos del convento de Regina Angelorum, que para ese entonces sostenían una doctrina contraria a la de esta orden.
Una devoción
Esta procesión se realiza desde la Real iglesia de San Antonio Abad de la calle Alfonso XII, antigua calle de las Armas, es aquí donde tiene su sede la primitiva Hermandad de los Nazarenos de Sevilla, la de Nuestro Padre Jesús Nazareno, Santa Cruz en Jerusalén y María Santísima de la Concepción, cuyo origen se sitúa en el año 1.340.
La procesión del silencio se realiza año tras año, cada viernes santo para conmemorar la Pasión de Cristo a manera de luto, es por ello, que la misma se acompaña de penitencia y dolor, pues es el último de los siete Dolores de María (El entierro de Jesús y la soledad de María) a la espera de la resurrección de su hijo. Una festividad que se ilumina con cirios y los asistentes quienes están en silencio hasta el final.
Un recorrido
Esta procesión sale a la una de la madrugada de la Real Iglesia de San Antonio Abad y realiza el recorrido por las calles de Placentines, Alemanes, Álvarez Quintero, Argote de Molina, Placentines, Francos, Villegas, Plaza del Salvador, Cuna, Plaza de Villasís, Orfila, Daoiz, García Tassara, Amor de Dios, San Miguel, Jesús del Gran Poder, Las Cortes, Concordia, Plaza de La Gavidia, San Juan de Avila, Sor Vicente María, Alfonso XII hasta llegar a el Silencio.
Procesión del Silencio, elementos
Las cofradías: esta procesión está constituida por los miembros de hermandades católicas a las que se integran los profesantes con el rito de la Jura de Reglas en el que el interesado jura fidelidad y servicio a su gremio besando el libro del Evangelio y el Libro de Reglas.
Los capirotes: que son los trajes que portan los cofrades en señal de arrepentimiento. Estos tienen un cono en la cabeza, ya que no se trata de un evento de gozo, sino de pagar una penitencia, una tela que cubre el pecho, la espalda y la cara, un traje que representa el señalamiento y la penitencia.
Cruz de Guía: representa el símbolo de la Semana Santa. Esta mide cerca de dos metros y debe ser llevada por el cofrade que lidera la procesión.
Vestimenta: durante esta procesión los asistentes van vestidos de monaguillos, soldados romanos, políticos, artistas y mujeres con rebozos.